La Tasa de Esfuerzo percibido (RPE, por sus siglas en inglés) es una medida subjetiva de la intensidad del ejercicio que se basa en las sensaciones físicas y mentales que experimenta el deportista durante la actividad. En ciclismo, la RPE se expresa mediante una escala numérica que va desde el reposo hasta el máximo esfuerzo (1-10) y está basada en la escala de Borg. La RPE es una herramienta muy útil para el entrenamiento de ciclismo, ya que permite ajustar la carga de trabajo a las condiciones individuales y ambientales de cada sesión. Además, la RPE ayuda a prevenir el sobreentrenamiento, el agotamiento y las lesiones, al respetar los límites y las necesidades del organismo.
La RPE se puede combinar con otros indicadores objetivos de la intensidad del ejercicio, como la frecuencia cardíaca, la potencia o la velocidad. Sin embargo, la RPE tiene la ventaja de ser más accesible, económica y personalizada que estos parámetros. La RPE también refleja mejor el impacto psicológico del ejercicio, que puede variar según el estado de ánimo, la motivación o el estrés del ciclista. Por eso, la RPE es una forma de escuchar al cuerpo y de entrenar con inteligencia y eficacia.
Para utilizar la RPE en el entrenamiento de ciclismo, se recomienda familiarizarse con la escala elegida y practicar su uso en diferentes situaciones y terrenos. Así, se podrá calibrar mejor el nivel de esfuerzo y adaptarlo a los objetivos y planes de entrenamiento. La RPE es una medida dinámica y flexible, que se puede modificar según las sensaciones del momento. Por ejemplo, si un día te siemtes más cansado o desmotivado, se puede reducir la intensidad del ejercicio y elegir un nivel de RPE más bajo. O si se quiere probar un reto nuevo, se puede aumentar la intensidad y elegir un nivel de RPE más alto. Por lo tanto, la RPE es una forma de entrenar con entusiasmo y disfrute, al tiempo que se mejora el rendimiento y la salud del ciclista.
La RPE tiene una gran aplicabilidad en el ciclismo, ya que este deporte implica una gran variedad de estímulos y situaciones que requieren diferentes niveles de esfuerzo. Por ejemplo, no es lo mismo pedalear en llano que en subida, o con viento a favor que en contra, o con un grupo que en solitario. La RPE permite ajustar la intensidad del ejercicio a cada circunstancia, sin depender de dispositivos externos o fórmulas matemáticas. La RPE también facilita el seguimiento y la evaluación del progreso del ciclista, al permitir comparar el nivel de esfuerzo percibido con el rendimiento obtenido en cada sesión. Así, se puede saber si se está mejorando la capacidad aeróbica, anaeróbica o muscular del ciclista.
La RPE es una medida sencilla pero poderosa para optimizar el entrenamiento de ciclismo. La RPE permite al ciclista conocer su cuerpo, sus límites y sus potencialidades, y adaptar su entrenamiento a sus objetivos personales. La RPE también fomenta el disfrute del ejercicio, al evitar el estrés y la frustración que pueden generar otros métodos más rígidos o complejos. La RPE es una forma de entrenar con pasión y confianza, al tiempo que se respeta la salud y el bienestar del ciclista.
En nuestros entrenamientos grupales hacemos un día a la semana entrenamiento por RPE, únete y aprende a escuchar y sentir tu cuerpo en esfuerzo.